¿Hablamos de TI o de negocio?

En el Master en Data Management que estoy cursando, llevamos un tiempo trabajando sobre la implicación  de negocio /tecnología y la dificultad para conseguir el alineamiento, la complejidad de llevar a éxito desarrollos TI y la necesaria implicación de negocio. 

El caso es que no me falta conciencia sobre ese tema y veo claro que estrategia, negocio e informática forman simbiosis.  Es necesario que la empresa, la consultoría TIC y la consultoría de dirección hablen en términos de negocio, de tecnología e información en un mismo discurso. Pero ese convencimiento no llega, la alineación no es suficiente.

 He trabajado muchos años en áreas de negocio (Dir.Comercial, CRM, Marketing, Control de Gestión, Riesgos...) siempre con un alto componente IT, diseñando soluciones, demandando trabajos, buceando en los datos, como responsable de proyectos, como usuaria y gestionando implantaciones y cambios en modelos de trabajo. 

He conocido casos de éxito y de fracaso por errores tanto de negocio como de informática, pero muchas veces he hecho el comentario de que el mayor problema lo tenemos en negocio. En la dirección por su escasa implicación en promover y apoyar los cambios organizativos necesarios para realmente gestionar los cambios propiciados por la tecnología. En los siguientes niveles de responsabilidad en cuanto a implicación más allá de demandantes/usuarios y sobre todo de falta de coordinación entre las diferentes áreas y requerimientos e implantaciones poco trabajadas.

Con la perspectiva que se obtiene cuando sales de las prisas del apagafuegos diario, observo un problema de falta de organización global de proyectos informáticos, demasiada tormenta de ideas sin seguir una planificación ordenada guiada por la planificación estratégica y un tema que es imprescindible atajar, los silos de información.

A negocio le falta trabajar en su modelo de negocio en relación a IT, en participar en la vida del proyecto y en trabajar mejor los requerimientos e implantaciones más allá de la implantación en producción informática, porque es ahí donde se extrae valor.

Muchas veces he observado la organización de áreas TI, su estructura, la definición de estándares y la búsqueda de mejora en sus procesos y en la gestión de proyectos para tratar de reconducir el aún así persistente problema de proyectos con desviaciones y dificultades para ver la luz. En las áreas comerciales necesitamos algo de ese tipo de organización que, sin romper nuestro dinamismo, nos ayude a sacar el mejor partido de los esfuerzos. Pensemos en estándares en definiciones y datos corporativos definidos desde negocio, coordinación y aprovechamiento de sinergias en demandas TI conjuntas o la propia metodología de proyectos aplicada en la organización de muchas de las actividades de negocio.

También he visto muchas veces como a informática también le cuesta entender la repercusión de su trabajo en la cuenta de resultados y trabaja con actitud pasiva como desarrollador de proyectos pero sin proactividad proponiendo mejoras o proyectos con repercusión en negocio.


Cuando alguien en negocio consiguió atravesar la línea que le separa de informática y se encontró con un técnico que cruzó la línea en sentido contrario el proyecto fue bien. 

Si además las diferentes áreas de negocio proyectan sobre TI una visión unificada, la dirección adopta los cambios organizativos que puedan ser necesarios y los usuarios aplican el cambio, el proyecto fue un éxito.